Mirábamos la tele sin verla, como la usan de distracción y ruido ambiental en muchos lugares, y comenzó la crónica de una corrida de toros. Entonces, una niña de unos catorce años levantó la vista y preguntó entre sorprendida y molesta: “¿pero todavía hay toros?” Y los presentes sentimos una punzada de vergüenza -¿torera?- por tener que explicar que sí, que aún subsiste el espectáculo de torturar y matar animales, que sí, que todavía seguimos considerando esa “tradición” como admisible pese a haber descartado otras no más bochornosas y violentas. Como sucede con el traje del Emperador desnudo, los niños señalan las vergüenzas sin reparo, como debería ser.
La Cultural y Deportiva Leonesa ha subido a Segunda División. Hasta ahí, celebración. Pero a renglón seguido se reclama que nos rasquemos el bolsillo. Todos. Hace casi un cuarto de siglo este ayuntamiento y sus ciudadanos sufragamos con impuestos un nuevo campo de fútbol destinado a un ascenso de categoría. No se subió (sí unos cuantos años después). Ahora se ha vuelto a subir y parece ser que el campo no sirve, que hay que reformarlo, adecentarlo, cumplir no sé qué normativa o acomodo, aunque la ciudad tiene menos habitantes y el club pocos más abonados. A pagar todos. Por fútbol.
Vienen a la mente otro club privado y otro deporte. Las imágenes de un paso religioso por las calles de Roma aupado a hombros de muy ufanos representantes políticos locales de uno y otro partido, traído y llevado (y llevados y traídos) hasta allí por impuestos de uno y otro ciudadano, cofrade o no. Cómo, cuánto, a quién, por qué… Seguir leyendo: https://www.lanuevacronica.com/opinion/futuro-preapocaliptico_177378_102.html?fbclid=IwY2xjawK8mWFleHRuA2FlbQIxMABicmlkETA0Y1Z5TUpSVjNwNnc4ZFA4AR5FEwH1TEsyWQVksFKcTWtvIgmaGUMvLOgeUHOrpi4amfLb0I4VKejCVonLQA_aem_TnCIqueWZaBvj-NIZYpbYg
(Publicado en La Nueva Crónica de León, en una sección titulada "Las razones del polizón", el 15/06/25)
No hay comentarios:
Publicar un comentario