Con objeto de preparar la inauguración, los empleados
relacionados con el protocolo efectuaron 78 llamadas telefónicas, tres de ellas
a números fijos, con un total de 134
minutos, aunque una en particular, de más de media hora, falsea la media (no ha
trascendido por qué). Durante esas conversaciones, doce de las cuales se produjeron
en horario no laboral, han tenido lugar dos percances domésticos (leves) y una
trifulca conyugal sin secuelas aparentes. Como consecuencia del teletrabajo, una
placa vitrocerámica no recuperará el brillo previo a una de esas llamadas. Los
correos electrónicos sumaron 183, aunque agrupados por conversaciones no más de
45; 51 se recibieron sin ser contestados aunque se solicitaba expresamente. Todo
ello sin contar las 687 invitaciones cursadas por el mismo procedimiento. Las
conversaciones reales (o como quieran llamarse cuando los interlocutores se ven
la cara al tiempo, o sea, conversan) han sumado 17, de ellas 3 videotransmitidas.
Los insultos fueron 18, las palabrotas 302 y las órdenes directas y tajantes,
14. No se procede a registrar blasfemias. Seguir leyendo: https://www.lanuevacronica.com/arropamiento
(Publicado en La Nueva Crónica de León, en una sección titulada "Las razones del polizón", el 07/11/2021)
No hay comentarios:
Publicar un comentario